miércoles, octubre 29, 2008

Mi Angel de la Guardia se llama Rolandao Francart SJ

Hay ocasiones en que las cosas salen de tal forma que simplemente quedamos sin palabras y mi llegada a Bruselas, para visitar la Cáritas Internacional fue una de ellas.
Todo empezó tal como estaba en el libreto. Salí de mi casa de Almagro en Madrid, a la una y media para tener tiempo de llegar al aeropuerto, hacer el chequeo, pesar mis maletas (pues por cada kilogramo de sobre peso hay que pagar $30.000 psos!!!! en Ryanair), y solo se pueden llevar 10 kg en cabina y 15 kg en la bodega. Pero justo eso tenía, claro que tuve que sacarle la pila al portatil que pesa 1.2 KG y dos libros. Bueno el vuelo no solo salió a tiempo sino que el capitan nos informó que debido a los vientos que había, llegaríamos 26 minutos antes de lo previsto... ¿se imaginan mi alegria? Yo había enviado un mail al padre L'Arbre, superior de la casa diciendole que llegaría entre las 8 y 9 de la noche. Pero con esa noticia creí que llegaría antes. Bueno ingenuo de mi.

Y aquí empieza mi viacrucis: el aeopuerto a donde llegó el avión no era el aeropuerto de Bruselas, sino el de un pueblo vecino que se llama Charleroi, y que recibe pocos vuelos. El autobus que sale para Bruselas solo sale cada hora y el de las 6 ya había salido, asi que, el tiempo que ganamos en el vuelo lo perdimos en tierra. Bueno, pero todavía estabamos en la posibilidad de llegar antes de las 9 de la noche. Salimos a las 7 de la noche del aeropuerto y llegamos a la estación de trenes que se llama Buselas Midi a las 7:45. Mi plan era el de tomar el metro y llegar a la estación Montgomery y despues hacer cambio a la estación Boileau y llegar a la casa en la Avenida de Sant Michel, 24. Y de repente, apreció un joven que me vio mirando el plano de Bruselas, y que venía en el mismo vuelo de Madrid. Le conté para dónde iba y me dijo que él me acompañaba a comprar el tiquete, que había de un viaje, de 10 viajes y tambien para dos o tres dias. Con tanta amabilidad acepté irme con él hasta la taquilla. El compró su tiquete de 10 viajes, y yo compré el de un viaje por 1.70 Euros. y aquí empieza Cristo a padecer. Me dijo que por qué no me iba en el tranvia, para conocer la ciudad de noche. La idea me gustó y acepté. Me fui con él hasta la parada del tranvía 81 y me esperó hasta que me subí. El se despidió y tomó el tanvía en el sentido contrario.

Empece a viajar viendo la ciudad, sin preocuparme por las estaciones, solo viendo las luces de la ciudad, pues sabía que eran 10 estaciones. En un momento vi que ya habían pasado más de 10 estaciones y empece a ver el mapa y los nombres de las estaciones y no estaban en mi mapa!!!! entonces me doy cuenta que estoy en el tranvia correcto pero en el sentido contrario. Me bajo en la estación penultima que se llama Parc Vivès. Eran las 8:45 PM. Me acercó a la placa que informa de los tranvias y veo que justo el último pasa a las 8:56 y lo tomo para llegar hasta la estación Montgomery a las 9:56, una hora despues de lo que habñia avisado en mi mail.

Alli me dirijo a la linea 23 que me llevaria a la estación cerca de mi casa y oh sorpresa, el siguiente tranvia pasaba a las 10:25, pues que hago? esperar. y salgo de la estación Bioleau a las 10:28 y me dirijo hasta la casa de los jesuitas. Todo cerrado. y lo pero NO HAY TIMBRE, no hay como avisar que llegué!

El tiempo pasa y se me ocurre dar la vuelta (pues sabía que en esa manzana quedaban varias casas de los jesuitas) pero todas sin timbre hasta que EUREKA! una con timbre: Casa de la Colombiere. Timbro, era como las 11 de la noche y una voz me responde "¿quien es?, ¿qué quiere?" yo, en un frances macarronico le digo "ye sui an yesuit da colombí" " ye envié imail pur le per Larbre, le superier" y la voz dice con plena seguridad "il e mort"

Dios mio, no era posible que la única persona que sabía que yo llegaba, estuviera muerta. A las 11 de la noche en una ciudad que no conocía! Entonces apareció mi angel de la guardia: era el hermano Ronald, que es dibujante de caricaturas, quien sin conocerme me dijo que el que había muerto era un hermano del superior y que eso había sido hacía tres años!!!! Que todo debía estar correctamente y me llevó a la casa y fuimos al comedor y había un aviso que decia: "nos visita un padre jesuita de Colombia JORGE SERRANO, quien estará con nosotros por dos dias". Me dejó en el comedor para que cenara y él se fue a buscar las llaves del cuarto y a los cinco minutos apareció con las llaves del cuarto 302.

Allá llegué a las 12:05, y de una, me metí en esa camita que era lo que estaba esperando desde que salí de Madrid, para descansar un poco de toda esta carrería y estar listo para la conversación con los amigos de Cáritas Belgica al día siguiente. Así que, Buenas noches a todos... nrrrrrr...

1 comentario:

Loretto y Simona dijo...

No sé cuantas personas en el mundo lean estos escritos , sólo sé que es una crónica llena de esperanzas y sueños posibles !...Maravillosa obra padre Serrano . Ud. sabe con su palabra abrir puertas ...como corazones dispuestos a hacer equipo ! Bendiciones tenga por ser un real ser humano ...con alas vitales !